«Quiero recordar a los hermanos y hermanas que padecen enfermedades mentales y también a las víctimas, a menudo jóvenes, del suicidio», dijo el pontífice tras el rezo del Ángelus dominical, desde la ventana del Palacio Apostólico.
Así, pidió a los fieles rezar por estas personas y sus familias.
«Para que no sean dejadas solas ni discriminadas, sino acogidas y apoyadas», instó.
El tema también ha sido abordado en Italia por el presidente de la República, Sergio Mattarella, quien subrayó además que esta lacra se ha visto agravada por la pandemia y el confinamiento.
«Es esencial mantener siempre alta la atención a todos los factores que pueden determinar desigualdad de trato a quienes sufren patologías mentales. Y es por lo tanto importante potenciar unos servicios de salud mental de calidad a todos los niveles», dijo el jefe del Estado italiano en un comunicado.