El director del periódico El Nuevo Diario, Persio Maldonado, dijo que el déficit comunicacional que existe en el gobierno lo suple el presidente Luis Abinader, cuando responde cada lunes lo que deberían hacer cada uno de sus funcionarios cuando así lo requieran las circunstancias.
“Yo creo que el gobierno ha adolecido, y eso se ha ido profundizando, de una especie de déficit comunicacional, y creo que no está en peor situación porque el presidente salva mucho ese déficit”, insistió el presidente de la Sociedad Dominicana de Diarios.
Agregó que hay funcionarios que no hacen lo que tienen que hacer en materia de comunicación, y eso es suplido por el presidente Abinader, y lo hace a través de la Semanal, que es la rueda de prensa que encabeza cada lunes en el Palacio Nacional, y el gobierno sería mucho mejor si tuviera más ayuda en una comunicación estratégica más clara.
“Pienso que el segundo mandato del presidente, y esto es una especulación, tiene que ver con el éxito del segundo triunfo, y esto es muy importante. Cuando tú lo ganas todo, te puede generar cierta confusión creer que necesitas menos a los otros y que lo puedes hacer tú”, indicó.
Maldonado dijo que uno de los principales errores de este segundo mandato fue el intento de aplicar una reforma fiscal, y la forma en cómo se hizo, y el gobierno se agencia un daño que no era necesario, que pudo haberlo hecho con su liderazgo y su reiterada validación en las pasadas elecciones, y tenía el aval para hacer una reforma tributaria.
“Porque aquí todo el mundo estaba claro que se necesita hacer unos ajustes para corregir un problema viejo que tiene la República Dominicana, que es la reestructuración fiscal, de un presupuesto deficitario, gastando más que lo que ingresa, pero ese intento de reforma le afectó el inicio de su segundo gobierno”, recalcó.
Persio Maldonado explicó que la manera en que fue retirada la reforma dio la sensación de que el gobierno seguía descontento, y ha habido como un pesar entre la sociedad y el gobierno, que tendrá que irse solucionando.
Dijo creer que el mensaje que dio el presidente el pasado domingo, que es una combinación de rendir cuentas de los primeros cien días y las festividades navideñas, fue positivo, y quizás con todo lo que se produce en las festividades de este fin de año se pueda subsanar un poco ese disgusto, y que en enero el gobierno retome el control del espíritu nacional.