SANTO DOMINGO.-República Dominicana.-En la víspera del primer mes de la tragedia que enlutó al país, con el colapso del techo de la discoteca Jet Set, el Ministerio Público, a través de la Dirección de Custodia y Administración de Bienes Incautados, tomó posesión de las ruinas del emblemático centro nocturno.
Aunque la Procuraduría no ha ofrecido detalles de manera pública, la incautación del inmueble, prueba de un eventual delito, forma parte de las investigaciones en curso, respecto a las causas del desplome del techo, ocurrido el pasado 8 de abril, lunes bailable amenizado por el merenguero Rubby Pérez, uno de los más de 230 muertos de la tragedia.
El lugar, rodeado por una cinta amarilla que limita el acceso de los curiosos, sigue custodiado por miembros de la Policía Nacional, mientras las flores depositadas por familiares, amigos y la ciudadanía en general, se han marchitado y los velones se han apagado, pero las fotos de los difuntos continúan intactas.
Aunque con menos frecuencia, la gente continúa asistiendo cada día a la zona de desastre que no pasa desapercibida entre transeúntes, que siempre se detienen a mirar a tomar fotos y videos.
Ya suman 38 las querellas depositadas por ante la Fiscalía del Distrito Nacional, en contra la gerencia de la Discoteca Jet Set y su propietario, por supuesta negligencia ante una vulnerabilidad en el techo que nos lo era evidente, sino que estuvo allí durante mucho tiempo.
Los familiares de las víctimas y los heridos se querellaron además en contra de la Alcaldía del Distrito Nacional por alegado incumpliendo de su labor como supervisor de las infraestructuras.
Anteriormente la Fiscalía del Distrito Nacional había inmovilizado las cuentas de Antonio Espaillat, propietario de la discoteca y quien habría intentado traspasar sus bienes a terceros.