NACIONES UNIDAS (AGENCIAS).-El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el martes una resolución que transforma la Misión Multinacional de Seguridad (MMAS) en Haití en una fuerza mayor para combatir las pandillas, con el objetivo de frenar la violencia en el empobrecido país.
La resolución presentada por Estados Unidos y Panamá, que contó con 12 votos a favor y tres abstenciones, prevé la creación de una «nueva fuerza de represión de las bandas» criminales que tendrá un máximo de 5.500 uniformados, es decir cinco veces más que el personal que tenía la MMAS.
«La comunidad internacional está compartiendo la carga», afirmó uno de los promotores de la resolución, Mike Waltz, enviado de Washington ante la ONU.
- Capacidad ampliada: La nueva fuerza tendrá un máximo de 5.500 uniformados, cinco veces más que el personal original de la MMAS.
- Mandato reforzado: Se le otorga a la fuerza mayor poder para combatir y reprimir a las bandas criminales que controlan gran parte de la capital, Puerto Príncipe, y se han extendido a otras regiones.
- Apoyo internacional: Varios países de la región han manifestado su respaldo, incluyendo República Dominicana, que había solicitado una misión más robusta, y otros como Jamaica, Belice y Bahamas, que han participado en la fuerza multinacional.
- Contexto de crisis: La medida llega en un momento crítico, con un control de las pandillas que la ONU estima en un 85% de Puerto Príncipe y un aumento considerable en los asesinatos y la inseguridad alimentaria.
- Reacción de los países: El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, ha celebrado la decisión. La resolución contó con 12 votos a favor y 3 abstenciones por parte de los miembros del Consejo de Seguridad.
- Iniciativa original: La Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) fue autorizada originalmente en octubre de 2023, con Kenia liderando el despliegue.
- Problemas iniciales: A lo largo de 2024 y 2025, la fuerza inicial se enfrentó a una escasez de personal y recursos, limitando su capacidad para contener la escalada de la violencia.
- Nuevos despliegues: Pese a las dificultades, Kenia continuó enviando contingentes de policías en un intento de reforzar la misión.
A pesar de la aprobación de la nueva fuerza, la situación en Haití sigue siendo frágil. La efectividad de la misión dependerá de la financiación, el personal y la capacidad de los países contribuyentes para trabajar en un entorno complejo y peligroso. La intervención internacional también se complementa con los esfuerzos del Consejo de Gobierno de Transición de Haití para buscar una solución política y celebrar elecciones.