Redacción internacional.- Un viaje ilegal desde Haití hacia Puerto Rico habría resultado en la muerte de al menos nueve bebés, quienes sucumbieron ante la sed, el hambre, la insolación o fiebre, según narró un joven haitiano que sobrevivió a la travesía de siete días.
Los niños, que estaban acompañados de sus madres, fueron lanzados al mar al fallecer a lo largo de la travesía de siete días, tras zarpar de Jeremie, en el sureste de Haití, narró Hilaire Duverson un estudiante de 21 años.
Informó que un grupo de 51 adultos, hombres y mujeres, junto a los infantes, quienes no pasaban del año de edad, zarparon desde Jeremie, al sur de Haití, hacia la “Isla del Encanto”.
Leonard Prophil, un religioso haitiano residente en Puerto Rico y que asiste a Duverson y los demás náufragos, manifestó a periódico puertorriqueño El Nuevo Día que “él (el joven) salió de Haití el 29 de octubre, lo que pasa es que ese grupo había intentado llegar a Puerto Rico en cinco ocasiones”.
Explicó que, en el último viaje, de siete días, “llegaron casi a Cuba, y desde ahí se les acabó la gasolina. Cuando iban a regresar para atrás encontraron un barco pirata, les explicaron y ellos les dieron gasolina y comida. En la embarcación venían nueve bebés y todos fallecieron. Ellos empezaron a tirar a todos los bebés al mar”.
Prophil indicó, según lo que le manifestó Duverson, que el capitán de la embarcación habría dado la orden de lanzar los cuerpos de los infantes al mar. El religioso señaló que las madres de los menores observaban mientras los cadáveres eran devorados por tiburones.
“Es una experiencia bien triste. Eran nueve bebés, todos fallecieron. Había niños de cuatro, cinco y seis meses”, agregó Prophil, quien indicó que en un punto la embarcación se volteó y la hélice causó heridas a varios de los tripulantes. “Eso fue un desastre, de hecho, ese muchacho (Duverson) está vivo porque el mismo Dios lo salvó”, concluyó el religioso.
De acuerdo a medios locales, Jeffrey Quiñones, portavoz de la Agencia de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos en Puerto Rico, informó que han estado manejando decenas de inmigrantes haitianos y dominicanos durante semanas, incluyendo al grupo de Duverson. El funcionario aclaró que no tienen forma de corroborar el relato de los infantes fallecidos.