Por José Francisco Peña Guaba
No me cabe la menor duda de que el perredeísmo de hoy, en gran parte representado por el PRM, tiene un karma histórico, no sé si culpa de la imprecación, producto de la gran deuda de esa organización con los miles de ciudadanos execrados por el trujillismo, o por la espalda que olímpicamente se les dio a los que ofrendaron fielmente su vida por la vuelta a la constitucionalidad del 1963, o los que lo dieron todo desde “el buey que más jala”, para construir la democracia, enfrentando los oscuros doce años de la semidictadura del doctor Joaquín Balaguer.
No sé el tamaño del adeudo que tiene los revolucionarios con el destino, para recibir tal castigo en los últimos 44 años, desde que llegaron al poder en el 1978, pero el cobro de esa carga moral ha sido de manera constante y mayúscula, porque la serie de nefastas situaciones ocurridas en una estela de impactantes sucesos no tiene una verdadera explicación lógica ni terrenal, tal vez, solo esotéricos mensajes por los gravísimos errores cometidos de los que la providencia se ha hecho cargo, veamos:
1- Los gobiernos del PRD, a excepción, en parte siendo sinceros del que encabezó Hipólito Mejía, siempre le dieron las espaldas a su dirigencias y bases, el de don Antonio Guzmán fue asaltado por el llamado grupo de Santiago y el del Salvador Jorge Blanco por los extrapartidos, conocí desde mi niñez a cientos de valerosos compañeros hombres y mujeres que lo dieron todo por la llegada al poder de ambos, y no recibieron absolutamente nada a cambio, sin embargo reconocidos oportunistas y hasta connotados adversarios fueron poderosos ministros de los mismos;
2- Tal ha sido la indignación del destino con la principal dirigencia de esa organización, que tuvieron fatales termino, el suicidio del bonachón de don Antonio, la prisión y persecución del que fue objeto Salvador Jorge Blanco, la muerte inesperada en la juventud de la madurez con apenas un poco más de 62 años de Jacobo Majluta y la más singular y significativa desaparición física, la de mi padre con el sufrimiento de un cáncer que lo devoró teniendo apenas 61 años de edad, díganme lectores, si eso no es causa suficiente como para analizar qué pasó ahí, mientras nuestros tradicionales adversarios llegaron a la longevidad, cuando su ida al mundo de lo ignoto era tan natural que sucediese;
3- Los revolucionarios con D o con M (dominicano o moderno) gobernaran al término de este mandato del presidente Abinader, menos de 17 años desde su llegada al país en 1961, estos han estado en el ostracismo opositor por 46 largos años inexplicablemente, aunque siendo mayoría en el apoyo popular, siempre tuvieron divididos, cosechando derrotas que se les hizo costumbre, peor aun cuando en esas gestiones los grandes beneficiarios, nunca fueron miembros de corazón de dicho partido, es por ello que nunca le fueron leales al mismo, los revolucionarios siempre han preferido a un externo frente a sus propios meritorios dirigentes, que fácil le ha sido a los chaqueteros o arribistas el obtener un buen decreto, y lo imposible lograrlo para el que se sacrificó por la causa, pero esto casi siempre ha sido así, por lo cual lo que sucede hoy en el actual gobierno del cambio no debiera sorprender a los perremeístas de larga data, conocedores de la exclusión en el ayer, por lo que pasa hoy, no es nada nuevo;
4- Tengo que admitir también, que los grandes beneficiarios económicos de las gestiones gubernamentales perredeístas no fue nunca su dirigencia, ni siquiera sus leales cooperantes, siempre fueron los aguzados aprovechados que sacaron su mejor tajada, se hicieron ricos en los gobiernos de los blancos, los que nunca les importó ese partido dejando en una miseria atroz a sus abnegados militantes que han ido pereciendo en la mayor orfandad económica, mientras otros disfrutaron y salieron con los bolsillos llenos, agraciados, beneficiarios del esfuerzo ajeno, veo cada día esto pasar con la indignación de reconocer las grandes luchas y desvelos de estos valerosos hombres y mujeres, de los cuales no se recuerdan ya sus hazañas;
5- Los perremeístas como es propio de su herencia divisoria del perredeísmo, se denotan, se apuñalan, se desacreditan y aún más, se autodestruyen, pareciesen gozar con la caída en desgracia de sus propios compañeros, estos prefieren hacerse los simpáticos con los de afuera que serles solidarios a los de adentro, bien se les puede encajar la frase popular de que son “candil de la calle, oscuridad de su casa”;
6- Los revolucionarios viejos y nuevos son en la oposición de izquierda, en los gobiernos son más conservadores que los de derecha, paradójico el hecho de que fue en los gobiernos del PLD que se reabrieron las relaciones con los países de la órbita socialista, y los que reconocieron a los militares constitucionalistas, reintegrándolos a las FFAA, previo un justo ascenso y posterior retiro, una deuda que tenía el perredeísmo, pero que nunca honró;
7- Todos somos consciente que la ciudadanía nuestra cree que los gobiernos eficaces solo son los que hacen obras de infraestructuras importantes, pero los gobiernos perredeístas han adolecido, salvo muy pocas excepciones de esa impronta, dilapidan cuantiosos recursos en tantos miniproyectos que dejan la sensación de que sus gestiones no son fructíferas y eso les aleja los apoyo de los electorados, solo basta recordar que en el año 1986 al todopoderoso PRD, el reformismo le ganó las elecciones solo mostrando sus inmensas obras realizadas, con la famosa frase de campaña ¡Y esto… lo hizo Balaguer;
8- Los PRD/PRM se desdicen olímpicamente, muy democráticos y participativos en la oposición, pero cuando llegan al gobierno no desean que sus bases voten, prefieren los acuerdos de aposento, les disgusta escuchar el rugir de la militancia, y apuestan siempre a darle el poder de decisión a la cúpula, su militancia es ninguneada y raramente tomada en cuenta para los fines estratégicos de la organización;
9- No sé en verdad si es obra de la mala suerte, pero en los gobiernos de los blancos siempre ocurren los mayores desajustes económicos, aumentos del costo de la vida, la más notable ineficiencia en los servicios públicos y un improductivo endeudamiento, que terminan creando un profundo malestar en la ciudadanía que los acusa de “no saber gobernar”, y entender que solo son buenos para hacer oposición, ahí está una de las causas principales de sus largas estadías fuera del Palacio Nacional; y
10- Los blancos no tienen “espíritu de cuerpo”, siempre andan en proyectos unipersonales que lastran el plan institucional, siempre enemistados, sus principales líderes nunca se ponen de acuerdo para las batallas del porvenir, una de las causas es que sus presidentes siempre se creen los merecedores de todos los lauros políticos, al desmeritar el trabajo y el liderazgo ajeno, por eso prefieren que ganen los contrarios a que uno de ellos mismos lo logre “el sorpasso” electoral con sus apoyos.
De todo lo anteriormente expuesto, lo más enigmático y paradójico es que el líder histórico de los blancos, es un negro y la mayoría casi absoluta de los altos funcionarios de sus gobiernos son de tez blanca, muy diferentes étnicamente, y en fenotipo a la amplia mayoría del pueblo que es mestiza, mulata y negra, a los que solo usan para buscar votos, y que al final solo reciben migajas en la repartición del pastel del poder.
El PRD de ayer es el mismo PRM de hoy, los mismos errores, los mismos comportamientos, los mismos olvidos, los mismos erráticos criterios, que solo le permiten gobernar apenas un cuatrienio y muchos otros afuera, he visto con pesar el dolor de muchos compañeros y compañeras desesperanzados por la actitud de su propio gobierno, ya que cumplieron 18 años fuera de la nómina pública, mientras gente que no hizo nada o muy poco por el triunfo del 2020, son designados en cargos rimbombantes.
A quién después se le puede pedir sacrificio y lealtad, cuando no fueron justamente tomados en cuenta, conozco decenas de profesionales distinguidos del perredeísmo ortodoxo que están en el banco, pero enganchados amigotes de ocasión ocupando los espacios gubernamentales que otros se ganaron, inexcusable razones, pese a sus edades que hoy no sean importantes funcionarios, Vicente Sánchez Baret, José Rodríguez Soldevila, Nano Porcella, Ramón Alburquerque, José Del Carmen Marcano, Enmanuel Esquea y el propio Guido Gómez, entre muchos otros meritorios dirigentes de esa organización, que labraron el camino que hoy otros sin sus méritos disfrutan, creo necesario recordar que el partido político o el Presidente de turno que no tiene memoria histórica será pasto de los nuevos amigos del poder, que le brindarán la misma lealtad, que muestran la dulce compañía de las amantes de ocasión, que solo acarician por paga.
Las mismas taras acompañan al PRM hoy, en donde tengo grandes amigos, cercanos familiares y gente muy respetada por quién esto escribe, no tengo ningún interés dañino contra estos, pero a decir verdad, apegado al recuento histórico vivido, me obliga a expresar lo que conozco desde que era un mozalbete, es esa capacidad única y autodestructiva de los perredeístas.
Vamos caminando hacia un 2024 y les deseo la mejor de la suerte para las elecciones venideras, pero estoy convencido como nadie que está, que la misma no les acompañará por los múltiples yerros cometidos y por el brutal olvido del que han sido objeto, los que de verdad trabajaron para esa causa, solo me resta recordarles que las traiciones internas tendrán sus consecuencias, ¡no lo duden!, solo tienen que verse los actuales oficialistas en el espejo de lo ocurrido en el PLD en el 2020, con la notable diferencia que, pese a la actitud divisionista de la cúpula morada, estos se ocuparon al decir verdad en mayor o en menor medida en darle participación a los suyos, por lo cual se ganaron el mote de “comesolos”.
La realidad del gobierno del cambio de hoy, es que está apartado de sus bases, a la que les han negado, inclusive el sagrado derecho de votar por sus autoridades, a las que han dejado imperdonablemente en su mayoría fuera de la nómina, para darle paso a los allegados, amigos, familiares y novias de los funcionarios, estos también se olvidaron de los cooperantes de siempre y solo se le ha dado participación a una parte de los trepadores inversionistas electorales, lejos de ponerse inteligentemente de acuerdo en tiempo hábil, y tomar prudentes correctivos, han preferido sacar del gobierno a su mayor gestor y representante empresarial, y de paso también a su jefe de campaña, que se sumaran lentamente a la larga lista de olvidados, hoy se gobierna con los popis, muy acicalados e inteligentes, pero sin compromiso político social alguno, salvo muy honrosas excepciones.
En tantos años en estas lides, sé del cobro compulsivo que en su momento les hace el pueblo y sus propios militantes a los gobiernos, por lo que quiero decirles desde ahora, tal vez a modo de vaticinio, que las elecciones del 2024 no serán la excepción, por ello, palco y cocaleca ¡tengan paciencia, ya lo verán!