Santo Domingo,- Un menor de edad muerto y todos los centros de salud, tanto públicos como privados, abarrotados, es el saldo más reciente de la embestida del dengue en República Dominicana como consecuencia de las torrenciales lluvias caídas en el país tras el paso de la tormenta tropical Franklin.
La primera alerta la dio la presidenta de la Sociedad Dominicana de Infectología, la doctora Rosa Abreu quien aseguró que el dengue está fuera de control de las autoridades, ya que las áreas de clínicas y hospitales dedicadas a dicha enfermedad están repletas de pacientes.
Eso quedó confirmado en el día de ayer cuando el subdirector del periódico Listín Diario, periodista Fabio Cabral denunció ayer sábado que duró 12 horas en la emergencia de un centro de salud privado de esta capital esperando una cama para ser hospitalizado tras ser diagnosticado con dengue, y dijo, a través de sus redes sociales, que los médicos que le atienden le informaron que la gente está desesperada por cama.
En ese mismo orden, la doctora Francia Paix gerente de emergencia del Hospital infantil Hugo Mendoza de la capital dijo que tuvieron que habilitar más camas por el incremento de casos de dengue en el país, y ayer sábado tenían 62 pacientes ingresados con sospecha de la enfermedad.
Mientras que en el hospital Robert Reid Cabral, de 32 pacientes que había ingresados por dengue uno de ellos perdió la vida este fin de semana.
Se trata del adolescente Junior Villilo ventura de 16 años de edad quien fue ingresado el pasado 21 de agosto con síntomas de la enfermedad como fiebre, dolor de cabeza, vómitos, y dolores abdominales.
Su devastado padre Mario Villilo, ahogado por el llanto, la tristeza y el dolor definió a Junior como el mejor hijo que Dios pudo haber dado, ya cursaba el cuarto del bachillerato y tenía grandes expectativas para ingresar a la universidad y hacerse profesional.
Mientras que el Ministerio de Salud Pública informó este domingo que se mantienen vigilante ante el aumento de los casos de dengue, y continúan los operativos de fumigación en zonas donde se han detectado nuevos casos.
