Por: José Cáceres
Al llegar este lunes a los 30 días de que el presidente Luis Abinader anunciara en su discurso de su segunda toma de posesión el pasado 16 de agosto de que enviaría al Congreso Nacional el Proyecto de Modificación a la Reforma Constitucional, que consta de cuatro puntos, lo cierto es que el mismo no ha logrado, el consenso necesario, ni dentro del Partido Revolucionario Moderno, ni en muchos sectores de la sociedad dominicana.
Desde la óptica del Poder Ejecutivo, la propuesta de reforma constitucional tiene el objetivo consolidar la independencia del Ministerio Público; garantizar la estabilidad constitucional de las reglas de elección presidencial y reducir la cantidad de diputados, así como unificar la celebración de las elecciones presidenciales, congresuales, parlamentarias de organismos internacionales y municipales.
Abogados, fiscales, periodistas del área de la comunicación política, sacerdotes, exmiembros eméritos del Tribunal Constitucional, congresistas del partido oficialista del PRM, de la Fuerza del Pueblo, del Partido de la Liberación Dominicana, entre otros, también han señalado su desacuerdo con que la carta magna sea modificada por considerar que no existen los motivos reales para que ello se produzca.
Algunos representantes de la Iglesia Católica, como el sacerdote Wilfredo Montaño mejor conocido como el padre Alegría, dijo en el espacio “De Entero Crédito” que una reforma a la Constitución es muy apresurada en estos momentos, ya que hay otros problemas por atender como la educación, la salud, la inseguridad ciudadana, la inflación a la comida y otros males que acogotan a la mayoría de la población.
También abogados constitucionalistas como Eduardo Jorge Prats, Manuel Fermín Cabral expresaron en un panel sobre el tema que no existe la necesidad en la actualidad de una modificación a la Carta Magna. Nassef Perdomo dijo que no ve necesario poner un candado para la reelección presidencial.
Leonel y PLD se oponen
El exmandatario Leonel Fernández, presidente del Partido Fuerza del Pueblo, ha reafirmado en varias ocasiones que la mejor forma de proteger la Constitución de la República, es no tocarla.
Ha dicho a la prensa nacional que la Carta Magna es considerada una constitución ejemplar en Hispanoamérica, por ello aseguró que no es necesario hacerle ningún tipo de modificación.
» Si la quieren proteger más, que aprueben la ley de referéndum. Eso es lo que queda pendiente, pero nos oponemos a que sea tocada», enfatizó.
Mientras que el Partido de la Liberación Dominicana, a través de un comunicado que fue leído por el expresidente de la República y de esa organización, Danilo Medina, calificó la reforma de “improcedente e innecesaria”, asegurando que la misma no constituye una prioridad en la actual coyuntura nacional.
La organización política dijo que la discusión sobre la reforma no es más que una distracción de los problemas reales que enfrenta el país, incluyendo la precariedad económica que afecta a la mayoría de los dominicanos.
Gómez, Cury y Acosta se oponen
Los exmagistrados eméritos del Tribunal Constitucional, Hermógenes Acosta, Wilson Gómez y Jottin Cury, han explicado públicamente en diversos escenarios públicos de que no es necesaria la modificación de la Constitución de la República, en estos momentos, ya que no existen razones para ello.
Wilson Gómez adujo que estuvo en contra de la reforma del 2015 y eso lo hizo saber cuándo era miembro del Tribunal Constitucional en su voto salvado y ahora sigue siendo coherente y cree que no debe modificar.
De su lado, Hermógenes Acosta, consideró que el anteproyecto de Ley a la Reforma Constitucional donde se verá el modelo de elección presidencial está incompleto porque no tiene categoría para convertirlo en clausula pétrea, al tiempo que consideró de innecesaria la modificación constitucional en estos momentos.
Jottin Cury, exjuez del TC, dijo no ver razones para auspiciar una reforma constitucional, como la ha defendido el presidente Abinader, quien ha expresado que es necesaria una nueva modificación para poner candados a la Carta Magna y garantizar la independencia del Ministerio Público.
Desistieron modificar el 174
A mediados de agosto, el coordinar general de Fiscales Dominicanos (Fiscaldom), Francisco Rodríguez y Edward López, de la Asociación de Fiscales de Carrera, (Adofic), declararon que el proyecto de la reforma constitucional que propone el presidente de la República, contemplaba «eliminar el Consejo Superior del Ministerio Público (CSMP)» de la carta magna y relegarlo a un a ley, iba a constituir en un retroceso para la independencia y autonomía del órgano de gobierno de institución persecutora.
El pasado 15 de agosto, luego que la Procuradora General de la República, Miriam Germán, enviara una misiva donde reveló que no había sido consultada para elaborar la propuesta de reforma constitucional donde se buscaba excluir el artículo 174 que rige el Consejo Superior del Ministerio Público, la cual “cayó como un misil de largo alcance”.
Horas después, el Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, emitió una declaración pública donde informaba que el gobierno de Luis Abinader desistía de modificar el artículo 174 de la Constitución, el cual reza así: “El órgano de gobierno interno del Ministerio Público es el Consejo Superior del Ministerio Público, el cual estará integrado de la manera siguiente:
1) El Procurador General de la República, quien lo presidirá
2) Un Procurador Adjunto del Procurador General de la República elegido por sus pares
3) Un Procurador General de Corte de Apelación elegido por sus pares
4) Un Procurador Fiscal o su equivalente elegido por sus pares
5) Un Fiscalizador elegido por sus pares. Párrafo.- La ley definirá el funcionamiento y organización de este consejo”.
“En el marco del comportamiento democrático que le caracteriza, el presidente Luis Abinader ha decidido excluir la modificación de las disposiciones constitucionales que se refieren a la conformación del Consejo Superior del Ministerio Público», dijo Antoliano Peralta.
Rebelión interna sobre reducción diputados
La cúpula dirigencial del Partido Revolucionario Moderno ha tenido que realizar varias reuniones internas para “aplacar” la rebelión de muchos diputados de la organización que se oponen a que se eliminen más de 53 diputados en la reforma Constitucional.
El día ocho de agosto, la propuesta del presidente Luis Abinader para reducir el número de diputados en el Congreso ha generado un gran descontento entre muchos de los congresistas del Partido Revolucionario Moderno (PRM), ya que eso atentaría contra la democracia.
«La democracia no se mutila, sino que se fortalece con la participación y eso conlleva a mantener el derecho a elegir y ser elegido», explicó el diputado Ignacio Aracena. También Ramón Bueno y Jesús Ogando se opusieron públicamente a la medida presidencial.
El vocero de los diputados de la Fuerza del Pueblo, Rafael Castillo, reafirmó que esa organización está en desacuerdo a esas pretensiones oficiales.
El diputado Robinson Díaz, de Santiago, al ser entrevistado en “De Entero Crédito” hace algunos días afirmó que en el partido se analiza el tema de la reducción de los diputados y aunque no sería 53 como plantea el Poder Ejecutivo, el número pudiera andar entre 10 y 20.
La postura de rechazo de los diputados del partido oficialista podría obstaculizar la reforma constitucional en el Congreso. A pesar de contar con una mayoría que les permitiría aprobar, sin ningún problema, una nueva Carta Magna, es justo notar que las visiones de los legisladores están divididas.
El “balde de agua fría” de la JCE
En un momento cumbre donde el Senado iniciará el proceso para escoger o ratificar a los miembros de la Junta Central Electoral, el pleno de la organización reunida con los congresistas emitió este jueves un documento en el que expuso las implicaciones que conllevaría unificar las elecciones municipales, congresuales y presidenciales, como se plantea en la propuesta de reforma constitucional.
“Dejamos en manos del Congreso Nacional tomar la decisión que entiendan, el pleno de la JCE ha cumplido con el deber de hacer las recomendaciones”, dijeron.
El próximo lunes, la comisión bicameral encargada de estudiar el proyecto de reforma constitucional se reunirá para discutir y analizar los documentos presentados con el fin de emitir un informe final.
Lean las conclusiones que llegó el Pleno de la Junta Central Electoral y se aprueba la unificación de las elecciones municipales con las congresuales y presidenciables.
Cada elector aumentaría su tiempo ejerciendo el sufragio,
Provocará un aumento en la congestión y largas filas en los colegios electorales.
Se proceda a la reducción de votantes por mesas electorales,
Implicará un aumento en las mesas de votación.
Con el aumento de colegios electorales también deberá adquirirse más equipos EDET para los colegios adicionados.
Se deberá robustecer el software para que tengan capacidad de soportar el escaneo y transmisión de más relaciones de votación.
El primer boletín de resultados sería mostrado a las 1:00 de la mañana, con solo 25% de los colegios.
Eso aumentaría la incertidumbre en los votantes.
Se calcula que en promedio cada elector tomaría entre 4 y 7 minutos para votar.
Se debería aumentar una hora más a la votación, iniciando a las 6:00 de la mañana
Habrá que modificar el artículo 236 de la Ley 20-23.
Creará incertidumbre a resultados de madrugada o al amanecer en los niveles de diputaciones, regidurías y vocalías.
Aumento de conflictos contenciosos electorales.