PUERTO PRÍNCIPE.- La región central de Haití vivió un fin de semana de extrema violencia tras una serie de ataques perpetrados por pandillas fuertemente armadas, que dejaron un saldo de hombres, mujeres y niños asesinados, además de numerosas viviendas incendiadas. Las agresiones obligaron a cientos de personas a huir en la oscuridad y buscar refugio en localidades cercanas.
Desde Pont-Sondé, el funcionario Guerby Simeus confirmó por teléfono casi una docena de muertes, entre ellas “una madre y su hijo y un empleado del gobierno local”, y lamentó que “Las bandas siguen en Pont-Sondé”, sin que lleguen refuerzos. Los ataques iniciaron entre viernes y sábado, incluso transmitidos en vivo por los propios pandilleros.

