Por José Cáceres
SANTO DOMINGO. El gerente de la discoteca Jet Set, el empresario Antonio Espaillat, reveló que cuando su hermana Maribel le llamó aquella madrugada del día 8 de abril, tras el desplome del techo de la instalación, donde le informó, ella debajo de los escombros, que se escuchó una explosión y de repente se vino al piso el techo.
Espaillat afirmó que, como había tres horas de diferencia, entre la República Dominicana y la ciudad de Nevada, Estados Unidos, y participaba en una Feria de Radio y Televisión, de inmediato fue al hotel recogió sus pertenencias y se fue al Aeropuerto donde consiguió un vuelo para Atlanta.
Afirmó que hace más de 30 años que adquirieron el local donde funcionaba el Cine el Portal y sobre esa instalación se adecuó lo que es hoy la discoteca.
«Estoy devastado, jamás pensé que cuando mi hermana me llamó era algo tan grande», precisó el empresario radiofónico al ser entrevistado hoy miércoles por la periodista Edith Febles, por Telesistema en el programa «El Día».
Dijo que su hermana no le pudo dar muchos detalles en ese momento sobre la magnitud de la tragedia, pero lo cierto es que se inquietó mucho.
«Según fueron pasando las horas, entonces comenzaron a llegar las terribles noticias sobre la cantidad de fallecidos y heridos», precisó.
Declaró que al llegar al país al día siguiente al país, quiso ir a la discoteca, pero su seguridad le recomendó que por asunto de seguridad no debía presentarse, porque los ánimos estaban muy caldeados.
Aseguró que las filtraciones siempre tuvieron que lidiar con ellas y los plafomes de yeso que tenían puestos eran cambiados con frecuencias por los propios empleados de la discoteca.
«Para eso no hay que alquilar empresas, son plafones de yeso que solo hay que quitar el dañado y poner el nuevo», enfatizó Espaillat.
Añadió que por regular lo que siempre caía era el agua de los aires, también obstrucciones en los drenajes, «cosas normales de aires acondicionados», pero dijo que no se daban cuenta de las fallas porque los plafones de yeso absorbían esa agua.
Precisó que si hubiese sabido que era algo evitable, habría tomado las medidas correctas en ese sentido porque ahí están sus empleados, sus familiares y muchos amigos de diferentes litorales que son asiduos visitantes del Jet Set.
No ha movido cuentas
De sus propios labios, Antonio Espaillat afirmó que no ha realizado ningún movimiento de sus cuentas económicas o transferencias de una empresa a otra.
«Mi abogado ya se pronunció en esos términos en un comunicado el pasado domingo», dijo.
Ha conversado con tres familias
Espaillat declaró que ha conversado con dos familias de las afectadas que perdieron seres queridos y otra que tienen heridos.
«Ellos me ha asegurado que no tomarán acciones legales contra mi persona, solo quiero colaborar para que todo se esclarezca, yo soy el primero que desea saber qué pasó y por qué paso», puntualizó.
Negó versión de ingeniero
Manifestó que no es cierto que haya tenido contacto con un ingeniero que se expresó en las redes sociales diciendo que le había ofrecido un presupuesto de cuatro millones de pesos para hacer arreglos en la discoteca.
«Eso no es verdad, nunca he conversado con ningún ingeniero en ese tenor», acotó.
El empresario afirmó que siempre compraban plafones y, justamente aquel 8 de abril, día de la tragedia que le arrebató la vida a 232 personas, se cambiaron plafones de yeso, aunque apuntó que no tenía el dato preciso de cuántos cambiaron.