ATLANTA (AGENCIAS).-¿Podrán los Bravos revertir la situación y aun así llegar a los playoffs? Bueno, no se convertirían en el primer equipo en llegar a la postemporada tras perder al menos 37 de sus primeros 64 juegos.
Los Astros de 2005 llegaron a la Serie Mundial tras un inicio de 26-38, y los Reales de 1981 tuvieron el mismo récord antes de conseguir un puesto en los playoffs debido a que un paro laboral llevó a la MLB a otorgar puestos a los ganadores de división de la primera y la segunda mitad.
Y los Bravos Milagrosos de 1914 siguen manteniendo viva la esperanza. Ese equipo ganó la Serie Mundial tras tener el mismo récord (27-37) que el club de este año.
«Salimos de los entrenamientos de primavera con la expectativa de ser realmente buenos», dijo el mánager de los Bravos, Brian Snitker en una nota de MLB.com. «Todavía tenemos margen para mejorar. Las expectativas son altas».
Salir de la racha
Antes de preocuparse por la posibilidad de una racha milagrosa, los Bravos necesitan romper una racha de derrotas que llegó a siete juegos con una derrota de 4-3 ante los Gigantes el domingo por la tarde en Oracle Park.
Cada una de las últimas cinco derrotas ha sido por una sola carrera. «Uno pensaría que algo eventualmente cedería y que se abriría paso», dijo el tercera base de los Bravos, Austin Riley. «No tengo una explicación clara de lo que se necesita para que arranquemos«.
Bueno, al menos esta última derrota no tuvo el final angustioso que había cerrado las cuatro anteriores. Los Bravos no desperdiciaron una ventaja de seis carreras en la novena entrada como el jueves, ni sufrieron una derrota por dejar tendido al rival como en los dos primeros juegos de esta serie.
Pero después de desperdiciar la mejor apertura de la carrera de Bryce Elder el sábado, los Bravos no pudieron aprovechar el comienzo más alentador del año de Spencer Strider. Strider pagó por las bases por bolas consecutivas que concedió para iniciar una cuarta entrada de tres carreras.
Pero solo permitió tres hits en seis entradas y mostró señales de mejoría. Aun así, a Strider lo único que le importa son los resultados. Y ciertamente no está contento con tener un récord de 0-5 y una efectividad de 5.40 en las cinco aperturas que ha hecho desde que regresó de la cirugía de codo del año pasado.