ESTADOS UNIDOS (NBAMANIACS.com)Durante muchos años, el Kawhi Leonard prime ha sido un animal mitológico. Un ser del que muchos hablaban pero que nunca podía aparecer a la hora de la verdad por culpa a su tendencia a los problemas físicos. Pero hoy ha vuelto a deleitarnos con su presencia. Hoy ha demostrado a los que dudaban por qué aquellos que estaban ahí hace seis años llevan tanto tiempo sin ser capaces de descartar al 100% a Los Angeles Clippers.
En uno de sus mejores partidos, el alero ha guiado a los angelinos a una victoria fundamental en el segundo partido en Denver. A los de Lue se les escapó el Game 1 por un pelo y por esa misma diferencia se han llevado el de esta madrugada, que ha caído de su lado por 102-105 y no les ha permitido tomarse un respiro hasta el último segundo. Una dinámica que la serie parece destinada a seguir.
Cita en el clutch
Nuggets y Clippers parecen haber acordado decidir cada partido en los últimos cinco minutos. Buena noticia para los aficionados, mejor aún para la venta de desfibriladores. Las infinitas cosas que ocurrieron en los tres primeros cuartos no pudieron alterar la igualdad que ha imperado en esta serie desde su arranque, y nos depararon un duelo aún más parejo que el primero dado que ninguno de los dos equipos llegó a tener nunca una ventaja de dobles dígitos.
Todo estaba destinado a decidirse en el clutch. Y ahí, decidió él.
Kawhi 3.0
Cuando se habla de Kawhi Leonard como un jugador robótico no se habla por hablar. Mientras otros parecen inventar sobre la marcha y encontrar soluciones en el momento, él muchas veces no tiene sino que hacerse sitio en su zona de confort y lanzar desde una distancia que parece capaz de medir al milímetro. Y así llega una canasta. Y la siguiente. Y la siguiente.
Y este encuentro fue quizás el epítome de esa versión. Kawhi vivió en la media distancia, llegando tanto desde el pick & roll como desde el juego en el poste y resolviendo con una precisión que rayó niveles inhumanos. En cierto momento llegó a estar en un 12/13 en tiros de campo, y la constante doble marca de los Nuggets en el tramo final solo pudo reducir esa eficiencia hasta el 15/19.
Insuficiente. Porque, por mucho que se empeñaran en lanzarle todos los marcadores posibles para sacar la bola de sus manos, Leonard brilló también como playmaker y penalizó esta decisión con buenas asistencias a Zubac y Powell. Y cuando la doble marca no llegó, puso la sentencia de la misma forma que llevaba haciendo toda la noche.
Aun así, como en todo partido tan apretado, la cosa fue de microdetalles que hoy, a diferencia del otro día, cayeron del lado visitante. Un mate sin oposición fallado por Aaron Gordon que habría puesto por delante a Denver se convirtió poco después en otra canasta de Kawhi Leonard; un rebote que Michael Porter Jr. no pudo asegurar con 100-100 en el marcador tardó 5 segundos en transformarse en un triple de Powell.
Y, en un choque decidido por una distancia tan corta, se hizo imposible no acordarse del 14/22 en tiros libres de los Nuggets. Incluido el 6/10 de Nikola Jokic.
Luces y sombras de un tres veces MVP
Jokic afrontó este encuentro de forma muy distinta al Game 1. Si en aquel vivió en la pintura, en esta ocasión pasó mucho más tiempo alejado de la zona, ejecutando la mayoría de sus lanzamientos desde el triple. Quizás con intención de alejar a Zubac del aro y reducir su efectividad defensiva, el serbio tuvo un plan ofensivo diferente, un plan que trajo tanto cosas buenas como malas.
Por un lado, tener a Zubac fuera de la pintura redujo en efecto su impacto en la mitad trasera de la cancha. Denver comenzó anotando canastas fáciles bajo el aro con algunos cortes a la espalda de la defensa, y con el paso de los minutos se fue castigando también desde el rebote ofensivo, sumando muchos puntos en segundas oportunidades.
Pero a su vez, privar a Jokic de su principal fuente de anotación hizo que este fuera un partido un tanto extraño para él. Con un 4/8 en triples, logró sumar de forma regular incluso desde el perímetro, pero no terminó de ser la amenaza letal que genera pánicos en las defensas que ha sido en otras ocasiones. A ratos, su incidencia en la anotación del equipo fue sorprendentemente discreta, un efecto secundario de esta plan quizás no del todo beneficioso.
Y aunque quizás no tenga que ver, cuando se le demandó ese peso anotador al serbio le costó ser resolutivo. Jokic no anotó un solo tiro de campo en los últimos nueve minutos, tomando algunas decisiones precipitadas, cometiendo algunas pérdidas y, sobre todo, errando el triple final que podría haber enviado el choque a la prórroga.
Fue, aun así, una gran actuación por su parte, pero una más mundana que la media. Y en un encuentro que se decidió en la foto finish, algunos de estos detalles llamaron la atención. Veremos si de cara al Game 3 es capaz de encontrar una estrategia que le permita volver a lucir como el tres veces MVP que, de momento, es.
Jugadores destacados
Estos fueron los hombres que guiaron a los Clippers a la victoria.
Kawhi Leonard
39 puntos con un 78,9% de acierto es simplemente sobrehumano. Todos los presentes en el Ball Arena veían una y otra vez cómo era incapaz de fallar y cómo ponía las cosas cada vez más cuesta arriba a los suyos. Y por si fuera poco, su defensa en el tramo final truncó también varias posesiones de los locales, haciéndolo aún más artífice de la victoria.
Norman Powell
Le costó la vida entrar en ritmo en ataque, pero Lue tuvo paciencia con él y acabó siendo la decisión correcta. 7 de sus 13 tantos llegaron en los últimos minutos, en los que resolvió con eficacia varias situaciones y convirtió un triple que empezó a inclinar la balanza del lado visitante a falta de 90 segundos.
Ivica Zubac
No se puede parar del todo a Jokic, pero el croata está haciendo todo lo posible para ralentizarlo. Y puede considerarse que lo está haciendo con éxito. Además, sumó en ataque gracias a sus 16 puntos y a las 4 asistencias que logró gracias a su buena lectura y toma de decisiones.