OREGON (NBAMANIACS.com).-Definitivamente los Lakers no lo están pasando bien en este comienzo de temporada. Anoche se presentaron en Portland sin LeBron James y en el primer tiempo, perdiendo ya claramente, dejaron de contar con Anthony Davis. Tales circunstancias se unieron al resurgimiento de Damian Lillard. ¿Resultado? Cómodo triunfo de los Blazers por 105-90.
Prácticamente no hubo partido en Oregon. Aunque ambos equipos llegaban con dudas y se esperaba una noche igualada, Portland fue muy superior; tanto como para ganar de 22 puntos al final del primer cuarto (llegaron a ser 34 en el transcurso del partido). Como decíamos, gran parte de culpa de tal diferencia la tuvo Damian Lillard. El base All-Star se fue hasta los 25 puntos en 31 minutos de juego con un 6 de 14 en triples (había metido un total de 18 en los nueve partidos anteriores). Obviamente acabó satisfecho.
«Creo que lancé mejor el balón. No tan bien como me hubiera gustado, con algunas de las oportunidades que tuve, pero estuve mejor lanzando la pelota y conseguimos otra victoria, así que me siento bien», explica.
Lillard estuvo muy bien, pero no solo. Jusuf Nurkic logró un doble-doble de 15 puntos y 17 rebotes, mientras que Robert Covington se fue hasta los 12 tantos con un 4 de 8 en triples. Ellos ayudaron a que el equipo no se resintiese de la mala noche de C.J. McCollum, que se quedó en 7 puntos con un 3 de 15 en tiros de campo.
Perdiendo a Davis
Anthony Davis llegó al partido en el Moda Center como duda por un problema en el pulgar. Finalmente fue de la partida, pero solo pudo estar siete minutos sobre el parqué. Los Lakers explicarían que se trataba de una enfermedad estomacal, algo certificado por su entrenador, Frank Vogel, quien dijo que el jugador había estado vomitando antes del partido, pero pensaba que podía jugar.
Sin él (y sin LeBron) nadie tomó el relevo. Russell Westbrook se quedó en 8 puntos con un 1 de 13 en tiros de campo y ningún titular estuvo en dobles figuras de anotación. Quien más puntos logró fue Malik Monk con 13, seguido de los 12 de Carmelo Anthony. Directamente fue un partido para olvidar por parte de los angelinos.
Cada posesión, cada minuto en la cancha, tiene que importar. En estos momentos no somos el equipo campeón que queremos ser, así que para llegar hasta ese punto, tenemos que ser humildes», expresa Dwight Howard, autor de 11 puntos y 7 rebotes.
