LOS ANGELES (NBAMANIACS.com).-Chicago ha vuelto a la acción haciendo lo que acostumbra este curso: ganar. Los chicos de Billy Donovan, quienes no jugaban desde el 12 de diciembre por un brote de coronavirus, lo hicieron anoche ante los Lakers para dejar dos cosas claras: DeMar DeRozan es un enorme jugador y ellos un buen equipo.
El escolta All-Star fue sin duda el mejor sobre el parqué. Superados los protocolos COVID, dejó una fantástica actuación de 38 puntos, 6 asistencias y 4 rebotes para liderar a los de Illinois, que fueron capaces de resolver el partido en el momento justo, en los últimos minutos.
Pese a que los Bulls contaron con un par de ventajas que se acercaron a los 10 puntos en los dos primeros cuartos, la realidad es que el encuentro estuvo en un puño hasta el final; tanto es así que a cuatro minutos para el final los angelinos vencían por tres puntos (103-106). Fue entonces cuando DeRozan mostró una vez más qué clase de jugador es para firmar ocho de los últimos doce puntos de los suyos es hacer que la victoria se quedase en el United Center.
«Es un honor que confíen en ti para esos momentos. Nunca lo doy por sentado. Es una descarga de adrenalina que no puedes imitar, así que intentas aprovecharla al máximo cada vez que te ponen en esa posición. No hay nada como eso. Tienes que tomarlo con su parte buena y su parte mala, y estoy dispuesto a aceptar ambas», expresa DeRozan.
Más allá de su gran despliegue, los de Illinois contaron con un doble-doble de 19 puntos y 13 rebotes por parte de Nikola Vucevic, con 19 puntos de Lonzo Ball y 17 puntos y 9 rebotes de Alex Caruso.
Los Lakers se quedan en la orilla
Los angelinos no jugaron un mal partido; estuvieron siempre en la pelea por la victoria y en ataque mostraron bastante acierto (51,2% en tiros de campo), la cuestión es que tenían delante un buen equipo que les hizo quedarse con la miel en los labios.
Sin contar con Anthony Davis, quien se perderá al menos cuatro semanas con una lesión en la rodilla izquierda, los de oro y púrpura volvieron a estar liderados por LeBron James (31 puntos, 14 rebotes y 6 asistencias). El Rey estuvo realmente bien y contó con el acompañamiento de Russell Westbrook (20 puntos) e Isaiah Thomas (13 puntos siendo titular). Ya desde el banquillo, Carmelo Anthony firmó 21 tantos. Westbrook cree que la entrada y salida constante de jugadores no les está ayudando.
«Obviamente estamos haciendo cosas sobre la marcha, averiguando cómo jugar con las alineaciones que tenemos y la gente que tenemos disponible. Los nuevos jugadores están entrando, así que tenemos que hacer lo que podamos. Eso es todo. Solo tienes que jugar duro y dejar que el resto se encargue de sí mismo».
