WAHSINGTON (EFE).-Para el director de la CIA, William Burns, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, no está loco pero es “extremadamente difícil razonar con él”.
Burns, en su comparecencia ante el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, dijo que el líder ruso está cada vez más aislado y radicalizado, “pero eso no lo hace un loco”.
“Estaba seguro de que había modernizado sus fuerzas armadas y que eran capaces de una victoria rápida y decisiva con costes mínimos. Se equivocó en todo”, dijo Burns.
Los servicios de inteligencia de EEUU calculan que han muerto entre 2,000 y 4,000 soldados rusos en la invasión de Ucrania, aunque reconocen que son unos números que no manejan con mucha seguridad.