SANTO DOMINGO. – Tras recibir sus cartas credenciales en el Palacio Nacional, el nuevo embajador de Haití en la República Dominicana, Emmanuel Fritz Longchamp, destacó el compromiso del presidente Luis Abinader con el restablecimiento de la estabilidad en el vecino país.
«El presidente Abinader ha renovado las buenas intenciones de la República Dominicana con respecto a Haití y me ha asegurado de que hace todo lo posible en su poder para que Haití regrese a su serenidad y su normalidad», expresó.
Longchamp subrayó que República Dominicana mantiene una postura firme de colaboración, sin abandonar el respeto a su soberanía.
El embajador indicó que actualmente existe una coincidencia entre la posición del Gobierno dominicano, el de Estados Unidos y la comunidad internacional en torno a la necesidad de que la Organización de Estados Americanos (OEA) asuma un papel de liderazgo en la búsqueda de soluciones.
“Por el momento está de acuerdo con el gobierno americano y la comunidad internacional por un liderazgo de la OEA en la resolución de la crisis en Haití”, sostuvo.
Entre las primeras gestiones diplomáticas, Longchamp informó que solicitó la autorización de un salvoconducto para estudiantes haitianos que necesitan transitar por territorio dominicano. “Hay dos cosas, primero las letras de confianza y de recuerdo que le he enviado, pero lo que yo le voy a dar es simplemente una solicitud para autorizar el autoconducto para 52 estudiantes financieros que deben pasar por la República Dominicana para ir a Colombia”, explicó.
“El Presidente Abinader nos ha dicho a todos los dos que continúen trabajando juntos para mejorar las relaciones entre Haití y la República Dominicana”, añadió el embajador, asegurando que ya se han comenzado a materializar acciones en esa dirección.
Longchamp reafirmó que su país no tiene intención de interferir en los asuntos internos de la República Dominicana. “Nosotros decimos y repetimos que no tenemos ningún derecho de interferir con la soberanía dominicana en la gestión de su política migratoria”, declaró. Sin embargo, hizo un llamado a que se respeten los tratados internacionales: “Le pedimos a todos que las convenciones internacionales y los acuerdos bilaterales sean respetados”.
Reiteró que la esperanza de Haití está puesta en un liderazgo regional que impulse una salida a la crisis: “Hay un esfuerzo que está siendo hecho en favor de un liderazgo de la OEA para facilitar la resolución de la crisis en Haití. Y nos sueltamos que sea reyucisto”.