Santo Domingo. El estelar jardinero dominicano Fernando Tatis Jr. fue ordenado por un árbitro independiente a pagar US$3.74 millones a la empresa Big League Advance (BLA), según reportó el San Diego Tribune. La decisión surge tras el intento del jugador de anular un acuerdo de ganancias futuras que firmó en 2017, cuando apenas tenía 18 años y militaba en Clase A dentro de la organización de los Padres de San Diego.
El pacto original entre Tatis y BLA fue suscrito en octubre de 2017, otorgándole US$2 millones en adelanto a cambio del 10 % de todas sus futuras ganancias. Con el contrato de 14 años y US$340 millones que el pelotero firmó con los Padres en 2021, la parte correspondiente a BLA ascendería a US$34 millones.
De acuerdo con documentos judiciales, Tatis no ha realizado pagos desde finales de 2023, lo que motivó a la compañía a presentar una petición ante el Tribunal Superior del Distrito de Columbia el pasado 24 de septiembre para confirmar el laudo arbitral. La solicitud incluye US$3.23 millones en pagos pendientes, más US$240,515 en intereses, US$250,000 en honorarios legales y US$14,349 en gastos adicionales.
El jugador de los Padres argumenta que BLA actuó como un prestamista sin licencia, utilizando tácticas manipuladoras e ilegales para atraerlo a un contrato injusto. Su equipo legal busca amparo en las leyes de protección al consumidor de California, alegando que el acuerdo fue perjudicial y que la empresa violó normativas estatales.
Sin embargo, el árbitro desestimó los intentos de Tatis de suspender el procedimiento arbitral, señalando que el anticipo de BLA no puede ser considerado un préstamo tradicional, ya que fue “pagado incondicionalmente”, incluso si el jugador no llegaba a las Grandes Ligas. Además, sostuvo que los fondos no fueron destinados a fines personales ni domésticos, por lo que no aplican las protecciones del código de consumidores de California.
El conflicto legal continúa, ya que el árbitro no tiene jurisdicción sobre la demanda que el pelotero mantiene en California, mientras BLA busca la ejecución del fallo arbitral en el Distrito de Columbia.
Con esta decisión, Tatis Jr. enfrenta un nuevo revés financiero fuera del terreno de juego, a pesar de ser uno de los contratos más lucrativos en la historia del béisbol profesional.