JERUSAMEN (YAHOO NOTICIAS).-Las autoridades israelíes informaron este sábado que recuperaron el cuerpo del ciudadano tailandés Nattapong Pinta, quien había sido secuestrado en el kibutz Nir Oz durante el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre de 2023.
El cadáver fue localizado en la ciudad de Rafah, al sur de Gaza, y devuelto a Israel como parte de una operación militar especial, según confirmó la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu.
El ejército israelí indicó que Pinta fue asesinado durante su cautiverio por miembros de las Brigadas Muyahidines, el mismo grupo armado responsable del secuestro y asesinato de otros rehenes, incluidos Shiri Bibas y sus hijos pequeños, así como los ciudadanos israelíes-estadounidenses Judith Weinstein y Gad Haggai, cuyos cuerpos también fueron recuperados recientemente. Israel aseguró que el hallazgo fue posible gracias a labores conjuntas del equipo de rehenes y de inteligencia militar.
El Foro de Familias de Rehenes expresó su solidaridad con los familiares de Pinta y urgió al gobierno a intensificar los esfuerzos para recuperar a los demás secuestrados. Actualmente, 55 personas continúan retenidas en Gaza, aunque se estima que más de la mitad ya han fallecido.
Pinta había llegado a Israel desde Tailandia para trabajar en la agricultura, y formaba parte del mayor grupo de extranjeros capturados por insurgentes de Hamás. Según el Ministerio de Exteriores tailandés, al menos 46 ciudadanos de esa nación han muerto durante el conflicto.
Mientras tanto, la ofensiva israelí sobre la Franja continúa. Funcionarios sanitarios locales informaron que al menos 22 personas murieron durante bombardeos nocturnos en varias zonas, incluyendo cuatro ataques en Muwasi, entre Rafah y Jan Yunis, y otro en un apartamento del norte, donde fallecieron una madre y cinco niños.
El gobierno israelí sostiene que sus operaciones buscan desmantelar las capacidades militares de Hamás y responder a los “ataques bárbaros” del grupo. También afirmó que actúa conforme al derecho internacional y toma precauciones para proteger a la población civil. Desde el inicio del conflicto, más de 54.000 palestinos han muerto, según el Ministerio de Salud de Gaza, cifra que incluye tanto combatientes como civiles.