ESTADOS UNIDOS (NBAMANIACS.COM)La temporada 2023-2024 se presenta llena de alicientes en la mejor liga del mundo. Y no solo por la coincidencia de Wembanyama y Holmgren, los dos nuevos unicornios en la NBA. También por la entrada en vigor del nuevo convenio colectivo de la NBA. La amenaza del lockout volvió a planear sobre la Liga, aunque esta vez lo hizo más tímidamente, y el convenio colectivo hasta 2030 tiene dos aspectos cuanto menos llamativos: vía libre a la marihuana y a las apuestas deportivas.
Pero sin lugar a dudas, lo más llamativo es la liberalización del uso de la marihuana en la NBA. Era un clamor de los jugadores, que por fin han visto satisfecha su demanda. De hecho, el consumo de marihuana en la NBA es de sobras conocido, y en numerosos estados de Estados Unidos es legal hacerlo. Ahora, la NBA da un paso más situándose al nivel de otras grandes ligas y competiciones como la MLB de béisbol o la UFC. Aunque no es oro todo lo que reluce.
Vayamos por partes. El actual convenio, firmado en 2017, establecía una suspensión de cinco partidos si un jugador daba positivo por marihuana tres veces. Ahora, desaparecen tanto estas sanciones como los controles para detectar su consumo. La NBA mantendrá los controles antidoping, pero simplemente dejará de buscar marihuana en los mismos. Lógicamente, el uso de productos prohibidos u otros estupefacientes seguirá prohibido en la NBA. En realidad, los controles aleatorios ya se suspendieron en 2021.
Todo empezó en la burbuja de Orlando
Para entender la razón de estos cambios hay que retroceder hasta la burbuja de Orlando, en plena crisis del coronavirus. Los Lakers ganaron aquella NBA decidida en DisneyWorld, que abrió las puertas al play-in. Jimmy Butler montó el negocio de café más lucrativo de la historia… y se suspendieron los controles de drogas recreacionales. Curiosamente, “allí se rompió el estigma de que no podías jugar si fumabas” en palabras de J.R. Smith, uno de los grandes defensores de su consumo que se coronó campeón con los Lakers en Orlando
El siempre controvertido J.R. Smith no es el único defensor de la marihuana entre los jugadores. Desde superestrellas como Kevin Durant a leyendas y Hall of Fame como Steve Nash, Allen Iverson o Kareem Abdul Jabbar se han posicionado a favor de permitir su consumo entre los jugadores de la NBA. Por no hablar de Steve Kerr, el artífice de los Warriors tetracampeones, que ha reconocido en incontables ocasiones su consumo para paliar sus problemas de espalda. “Es mejor que los medicamentos”, afirmó el también seleccionador del Team USA.
La burbuja acabó, y la NBA volvió a la normalidad con el fin del convenio colectivo cada vez más cerca. Si bien el lockout no fue una amenaza 100% real, sí que eran cada vez más las voces que se posicionaron a favor de liberalizar el consumo de marihuana en la Liga. Todos los estamentos se mostraban a favor de un cambio que ya es una realidad. Se estima que más de la mitad de jugadores la consumen, y como dijo Joe Dummars hace 25 años “si hacen controles se tiene que suspender la liga”.
¿Conflicto con AMA y FIBA?
No es ninguna sorpresa que esta decisión choca de frente con la regulación de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). Y veremos qué pasa con la FIBA, pues numerosas estrellas NBA juegan en verano con sus selecciones: Jokic, Anteto, Embiid, Sabonis, el Team USA o los españoles NBA tienen en el horizonte el Mundial y, sobre todo, los Juegos Olímpicos de París 2024 el próximo verano. ¿Qué pasará si la AMA realiza controles y dan positivo por marihuana?
Si bien el cannabidol (CBD) está permitido —se eliminó de la lista de sustancias prohibidas en 2018—, el THC, componente psicoactivo del cannabis, no lo está. Eso sí, la propia AMA también ha introducido modificaciones en los últimos tiempos. Se considera positivo cuando la cantidad de THC en orina es superior a los 150 nanogramos por litro, una cifra sensiblemente por encima de los límites establecidos en 2013. Y siempre que hablemos de consumo en competición.