VIENA.-Los ministros de alianza OPEP+ iniciaron este domingo una reunión en Viena para debatir una solución a la caída de los precios del petróleo, con la posibilidad de un nuevo recorte de la producción sobre la mesa, en medio de tensiones entre Arabia Saudita y Rusia.
Los trece miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderados por Arabia Saudita, sostuvieron una reunión el sábado y este domingo se sumaron a las discusiones el grupo de sus diez socios, encabezados por Rusia.
La reunión comenzó casi tres horas después de lo previsto, indicó a la AFP una fuente cercana a las negociaciones, que afirmó que entre las opciones que hay sobre la mesa está un recorte de un millón de barriles diarios.
Pero el desenlace de la reunión, que es la segunda cita presencial de la alianza desde marzo de 2020, es incierto.
A su llegada a la sede la OPEP este domingo, los ministros optaron por el mutismo, ante las preguntas de una multitud de periodistas congregados en la entrada.
Los delegados se reúnen en un clima de incertidumbre sobre la economía global, con varios indicadores económicos negativos para la demanda de crudo.
– El temor a una recesión –
“Todo está sobre la mesa”, afirmó el sábado a los periodistas el representante de Irán ante la organización, Amir Hosein Zamaninia.
“Seguimos discutiendo”, dijo por su lado a la prensa el ministro de Petróleo de Venezuela, Pedro Tellechea.
La decisión de regular la oferta con un recorte de la producción para apuntalar los precios enfrenta resistencias de países que abogan por mantener las cuotas porque necesitan más ingresos petroleros.
El representante saudita, el ministro de Energía Abdel Aziz bin Salmán, evitó contestar las preguntas de los periodistas el sábado.
“Hace buen tiempo, disfruten el resto del fin de semana”, dijo fiel a su estilo.
Su homólogo emiratí, Suhail al Mazrouei, destacó que la alianza petrolera siempre “toma la decisión correcta para equilibrar el mercado”.
“Esperamos con impaciencia una solución que garantice el equilibrio de la oferta y de la demanda”, aseguró.
Pese a que los precios del petróleo repuntaron en las dos últimas jornadas, las cotizaciones han caído un 10% desde que varios miembros de la OPEP+ anunciaran un recorte sorpresivo de su producción de más de un millón de barriles por día a principios de abril.
Esta reducción de la producción se topó con un mercado acechado por el impacto de la inflación en el consumo, el endurecimiento monetario de los grandes bancos, una recuperación de la demanda china menos fluida a lo esperado y varias turbulencias que afectaron al sistema financiero.
El Brent, que es la referencia en Europa, está a 76 dólares el barril y el marcador estadounidense el WTI cotiza a 71 dólares, muy lejos de los niveles alcanzados en marzo de 2022 al inicio de la guerra en Ucrania, cuando llegaron a cerca de 140 dólares el barril.
Giovanni Staunovo, analista de UBS, indicó que “parece que las posibilidades (de un nuevo recorte de la producción) han aumentado considerablemente”, y citó el debilitamiento de varios indicadores económicos y “los temores a una recesión”.
Yousef Alshammari, jefe de investigación de mercado de CMarkits, dijo a AFP al iniciarse la reunión que “esperaba que lo más probable es que no se produjera ningún cambio”.
Ahora, Alshammari cree “que lo más probable es que haya un recorte”.
“Yo esperaría que el reino de Arabia Saudita presione para un recorte de al menos medio millón de barriles”, proyectó.
– “Un frente unido” –
La reunión desvelará si Arabia Saudita logra convencer a Rusia, que es el otro pilar aglutinador del grupo, para cerrar el grifo del crudo, que proporciona a Moscú ingresos para financiar su ofensiva militar.
El vice primer ministro ruso, a cargo de la cartera de Energía, Alexander Novak, dijo a finales de mayo al diario ruso Izvestia: “No creo que haya nuevos cambios”.
Debido a las sanciones de las potencias occidentales, el crudo ruso sólo puede comerciarse a un precio igual o inferior a 60 dólares.
“En cambio, Arabia Saudita necesita precios más elevados para equilibrar su presupuesto”, señaló Barbara Lambrecht, analista de Commerzbank, en una nota.
Pero, “pese a los conflictos de interés actuales, los dos principales productores del cartel van a aplicarse para mantener la unidad del grupo, que tiene más poder gracias al frente unido que están mostrando”, afirmó Lambrecht.