Por Carlos Tomás del Pozo
En el competitivo escenario del turismo en América Latina, República Dominicana ha dado un paso audaz y estratégico que la posiciona por encima de muchos países de la región con la inversión de fondos de pensiones para el desarrollo turístico.
A diferencia de otras economías donde los fondos de pensiones se destinan casi exclusivamente a bonos gubernamentales o al sector financiero, en República Dominicana, se ha apostado por un modelo innovador que fortalece simultáneamente el turismo y la seguridad social.
Esto no solo fortalece el sistema de pensiones, sino que impulsa una de las industrias más dinámicas de la nación, consolidando a República Dominicana como un destino turístico de referencia a nivel global.
En nuestra región, esta es una estrategia innovadora, debido a que mientras países como; México y Colombia han explorado diversas formas de financiamiento para el sector turístico, la inversión de fondos de pensiones en esta industria, sigue siendo un modelo poco explotado.
En economías como la de Brasil, los fondos de pensiones están mayormente concentrados en inversiones en infraestructura y energía, mientras que en Argentina, los recursos previsionales han enfrentado restricciones que limitan su impacto en sectores estratégicos como el turismo.
República Dominicana en cambio, ha diseñado un modelo de inversión que no solo beneficia a los afiliados al sistema de pensiones, sino que también genera un efecto multiplicador en la economía.
Esta diversificación del portafolio de inversiones, ha permitido el desarrollo de proyectos hoteleros en zonas claves como la provincia La Altagracia, en donde se ha impulsado una decena de proyectos turísticos; en el Gran Santo Domingo, dos hoteles de ciudad; San Pedro de Macorís con un complejo residencial turístico; y Samaná, con un hotel de playa enfocado en el turismo sostenible.
La aprobación de más de RD$227 mil millones de pesos en inversiones en los últimos dos años, ha duplicando el monto alcanzado a diciembre de 2022, provocando un impacto en la economía y el empleo.
Otros RD$20 mil millones de pesos, han sido destinados a la construcción de hoteles de playa con mas de 1,600 habitaciones, generando cerca de 2,000 empleos directos e indirectos.
Adicionalmente otros RD$17 mil millones, han sido invertidos en la construcción y remodelación de infraestructuras turísticas.
Según las cifras oficiales, el sector turístico es una de las áreas con mayor número de cotizantes al Sistema Dominicano de Pensiones (SDP), con 165,000 trabajadores que aportan más de RD$380 millones mensuales al sistema de capitalización individual.
Este enfoque de nuestro país, contrasta con el de otras economías de la región, donde el financiamiento del turismo, aún depende en gran medida de la inversión extranjera o del crédito bancario tradicional, lo que limita el desarrollo de nuevos proyectos.
Sin embargo; es importante destacar que como toda actividad humana es susceptible de riesgos, debemos todos seguir apostando, aun mayor cuidado y protección de la llamada gallinita de oro y ahora con mucho mayor celo.