ESTADOS UNIDOS (NBAMANIACS.com).-Austin Reaves será baja durante al menos una semana. Así lo han dado a conocer Los Angeles Lakers, que han anunciado que el escolta ha sufrido una distensión en la pantorrilla izquierda y que será revaluado una vez transcurrido este periodo, dejando a los de Redick sin uno de sus principales anotadores.
No obstante, los californianos pueden sentirse afortunados, pues este tipo de lesiones normalmente requieren un mayor periodo de recuperación. Las distensiones en esta zona acostumbran a dejar a los jugadores apartados durante un plazo de entre dos y cuatro semanas, aunque los angelinos han asegurado que la dolencia de Reaves es «leve» y parecen optimistas con respecto a su regreso.
La ausencia llega además en la zona de menor congestión del calendario, pues, con las semifinales y la final de la Copa disputándose en estas fechas, el ritmo de partidos disminuye. De esta forma, los Lakers solo disputará dos encuentro hasta que transcurran los siete días de baja de Austin, que, de cumplir los plazos estimados podría regresar para el choque del sábado 20 de diciembre ante los Clippers.
Encontrando su rol
Reaves está firmando una temporada extraordinaria, en la que sus capacidades anotadoras han ayudado a los Lakers a sobrevivir a las ausencias de Luka Doncic y LeBron James en el tramo inicial del curso. Sin embargo, con ambos de regreso, está teniendo algunos problemas para mantener su nivel al lado de dos estrellas de tanto peso.
En sus dos últimas actuaciones el escolta ha quedado bastante relegado al segundo plano, algo que no solo ha afectado a su volumen de tiros y de posesiones sino también a su eficiencia. Pese a que promedia 27,3 puntos por partido con un 50,3% de acierto en lanzamientos de campo, en los dos encuentros más recientes estos números caen hasta los 13 tantos y un 28,1% en tiro, datos que, cuando esté de vuelta, veremos si son producto de una mala racha o de un verdadero problema de encaje.
Mientras, Redick deberá buscar un sustituto que dé algo más de equilibrio a un quinteto que viene de sufrir bastante ante la velocidad y agresividad de los Spurs. Esto convierte a Marcus Smart en el favorito para ocupar dicha posición, manteniendo a Gabe Vincent como manejador de la segunda unidad, aunque habrá que esperar a la visita a Phoenix de mañana para ver por qué se acaba decantando finalmente el técnico.

