Santo Domingo. – El presidente dominicano, Luis Abinader, aclaró esta tarde que la situación entre República Dominicana y Haití no se trata simplemente de un problema migratorio, sino que constituye un asunto de seguridad nacional.
El jefe del Estado explicó que tras el asesinato del expresidente haitiano Jovenel Moïse, la situación en el vecino país se ha agravado, con un crecimiento alarmante del control de las bandas armadas, especialmente en la zona sur de Haití.
Valoró el respaldo de sus antecesores Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina, con quienes ha sostenido encuentros en los que se ha abordado el impacto de la crisis haitiana en la seguridad dominicana. Destacó que todos han coincidido en la necesidad de tratar la migración haitiana como un tema de interés nacional.
El jefe de Estado ofreció estas declaraciones durante su participación en el almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, celebrado en la sede de los periódicos El Nacional, Hoy y El Día.