PANAMA (AGENCIAS).-El expresidente de Panamá Ricardo Martinelli (2009-2014) tendrá que cumplir su pena de prisión de 10 años y seis meses por lavado de activos y, según expertos constitucionales, no podrá presentarse a las elecciones presidenciales de mayo, La decisión fue tomada por el Tribunal Supremo de Justicia.
Martinelli perdió su última instancia legal luego de que en julio de 2023 fuera condenado a 10 años y 6 meses de cárcel, además de una multa por más de 19,2 millones de dólares, tras ser acusado de corrupción en el escándalo conocido como “New Business”.
Así, Martinelli se convierte en el primer expresidente en la historia democrática en Panamá en ser condenado a cárcel por este tipo de delito. Una decisión que se produce tan solo un día antes de que comience oficialmente la campaña para las elecciones panameñas.
En junio pasado, Martinelli fue declarado candidato a la Presidencia luego de haber obtenido el triunfo en las primarias del partido Realizando Metas (RM), fundado por el político panameño en 2021.
Debido a todos los procesos en su contra, el exmandatario perdió el liderazgo del Centro Democrático (CD), con el que militó durante casi toda su carrera política.
Según algunas encuestas anticipadas, el expresidente tenía posibilidades de un triunfo en las elecciones que se celebrarán en tres meses, pero con la decisión del Tribunal Supremo cambia todo el panorama político en Panamá.
“Desde el punto de vista constitucional” Martinelli “no podría correr una vez quede en firme el fallo de la Corte Suprema de Justicia, porque hay una inhabilitación constitucional”, dijo a la agencia EFE el experto constitucionalista Ernesto Cedeño.
La sentencia quedará en firme después de 5 días contados a partir de este viernes e inhabilita a Martinelli porque la pena es a más de 5 años de cárcel y dada la naturaleza del delito, de acuerdo con los expertos.
El político de 71 años fue presidente de Panamá entre 2009 y 2014 y ya había cumplido una pena de prisión de un año en Estados Unidos por el mismo caso de corrupción.
Posteriormente, se le imputaron varios cargos por el escándalo de corrupción de Odebrecht, que salpicó varios Gobiernos latinoamericanos.
El caso ‘New Business’
El fallo adverso para Martinelli tiene relación con la compra que hizo en 2010, mientras era presidente, de la mayoría de las acciones de Editora Panamá América con dinero proveniente del cobro de comisiones en obras de infraestructura.
Para esa compra se usó una parte de los 43,9 millones de dólares que distintas empresas depositaron, a través de sociedades provenientes del pago de sobornos, hasta un 10% del monto de los contratos originales en obras públicas, según la Justicia.
Por este caso, conocido como “New Business” por nombre de una de las sociedades utilizadas en la trama, el exmandatario fue juzgado del 23 de mayo al 2 de junio de 2023 y el fallo fue dictado en julio.
Distintas denuncias de corrupción afectan a figuras públicas en Panamá
No solo el nombre de Martinelli se ha puesto en entredicho. Sus dos hijos pagaron cárcel por el caso de Odebrecht en Estados Unidos, luego de declararse culpables de haber lavado 28 millones de dólares y haber recibido sobornos por parte de la empresa brasileña.
El expresidente Juan Carlos Varela, quien lideró al país luego de Martinelli, entre 2014 y 2019, también fue acusado de corrupción por el Gobierno de Estados Unidos por sus vínculos a “gran escala e importantes casos de corrupción”.
El ex presidente de Panamá Juan Carlos Varela está rodeado de periodistas cuando llega a la fiscalía para ser interrogado sobre supuestas donaciones ilegales de campaña del gigante brasileño de la construcción Odebrecht, en la Ciudad de Panamá, el 2 de julio de 2020, en medio de la nueva pandemia de coronavirus COVID-19. Juan Carlos Varela está siendo interrogado por el fiscal anticorrupción sobre las donaciones realizadas por Odebrecht a su campaña política de cara a las elecciones presidenciales de 2014. AFP – MAURICIO VALENZUELA
Martinelli también es investigado en España, tras ser acusado –nuevamente– de corrupción. Esta vez por sobornos que la constructora FCC española confesó haber pagado a su Gobierno, además de otro caso de espionaje a una mujer española.
Y aunque son múltiples las acusaciones de corrupción en su contra, los partidarios del político defienden que ha sido uno de los presidentes que mayor progreso le ha traído a Panamá.