MIAMI (AP).-El gobierno estadounidense presentó el jueves ante una jueza federal de Miami dos acusaciones criminales contra un empresario de doble nacionalidad haitiana y chilena por su presunta participación en el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse.
Rodolphe Jaar, uno de los sospechosos claves en el caso, tuvo su primera comparecencia judicial ante la jueza Lauren Louis y fue acusado de asociación ilícita para cometer un asesinato o matar fuera de Estados Unidos, y de suministrar apoyo material que resultó en muerte, sabiendo que esa ayuda sería utilizada para preparar o realizar una conspiración para matar o secuestrar.
De ser encontrado culpable, Jaar podría ser condenado a prisión perpetua.
Jaar es el segundo extranjero que llega a Estados Unidos para enfrentar acusaciones relacionadas con el asesinato del presidente haitiano. A comienzos de enero, otro de los sospechosos clave, el exsoldado colombiano Mario Antonio Palacios Palacios, fue acusado en el mismo tribunal federal con idénticos cargos.
De acuerdo con las acusaciones, Jaar y un grupo de aproximadamente 20 soldados colombianos y ciudadanos haitianos-estadounidenses participaron en un operativo para secuestrar o matar al presidente haitiano. Los cargos alegan que Jaar estuvo presente cuando otro de los participantes en la conspiración —identificado sólo como “conspirador número 1″— obtuvo la firma de un exjuez haitiano en un pedido escrito de asistencia para arrestar a Moïse.
Ese “conspirador número 1”, al que sólo identifican en la acusación como un ciudadano haitiano-estadounidense, viajó desde Haití a Estados Unidos para avanzar con la conspiración y suministró el documento a otras personas. Luego, según los documentos, regresó a Haití el 1 de julio para participar en el operativo contra el mandatario de la nación caribeña.
Jaar fue detenido en República Dominicana y según las autoridades estadounidenses aceptó voluntariamente ser trasladado el miércoles a Miami para ser juzgado en los tribunales federales. Permanece arrestado en una prisión federal del sur de la Florida.
Autoridades de República Dominicana dijeron que detuvieron el 7 de enero a Jaar con ayuda del gobierno estadounidense, cuando intentaba ingresar desde Haití, país con el que comparten la isla La Española.
Moïse, de 53 años, fue asesinado el 7 de julio, cuando un grupo de personas desconocidas irrumpió en su residencia privada en Puerto Príncipe.
De acuerdo con las acusaciones, si bien en un principio el objetivo de la conspiración era secuestrar al presidente haitiano, terminó cambiando su finalidad para matarlo. El documento señala que varios de los conspiradores ingresaron a la casa de Moïse para asesinarlo, y así lo hicieron.
Jaar, indican las acusaciones, fue responsable de suministrar armas a los colombianos para que concretaran el operativo. Después del asesinato se comunicó con el “conspirador 1” y con otros para ayudar a los colombianos y al “conspirador 1” mientras se escondían de las autoridades haitianas, según los cargos.
El “conspirador 1” uno fue arrestado en Haití y permanece detenido, de acuerdo con la información del departamento de Justicia de Estados Unidos.
Jaar, de 49 años, nació en Haití y es graduado en administración de empresas, de acuerdo con documentos judiciales. En 2013 fue procesado en una corte federal de Miami bajo acusaciones de haber conspirado para contrabandear cocaína de Colombia y Venezuela, a través de Haití, y hacerla llegar a Estados Unidos. Se declaró culpable y fue condenado a casi cuatro años de prisión, según documentos judiciales. En aquel momento su abogado dijo que había cooperado con las autoridades estadounidenses.
Palacios, el exsoldado colombiano de 43 años también acusado en Miami, fue detenido primero en Jamaica en octubre. A comienzos de enero, en una escala en Panamá cuando estaba siendo trasladado a Colombia, fue notificado de que las autoridades estadounidenses presentarían acusaciones en su contra en el sur de la Florida. De acuerdo con Washington, accedió entonces a ser trasladado al sur de la Florida.