NUEVA YORK.- La organización internacional Human Rights Watch criticó el veto de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para evitar un llamado a que cese el fuego en la franja de Gaza.
Advirtió que esa decisión llevaría al país a contribuir a los presuntos crímenes de guerra cometidos por Israel desde hace dos meses, cuando estalló el conflicto con el grupo terrorista Hamás.
Louis Charbonneau, director de la organización internacional ante la ONU, manifestó a través de la plataforma X: “Al seguir dando a Israel armas y cobertura diplomática mientras comete atrocidades, incluyendo castigos colectivos contra la población civil palestina, Estados Unidos se arriesga a hacerse cómplice de crímenes de guerra”.
La resolución, que fue redactada por Emiratos Árabes Unidos con casi 100 copatrocinadores, recibió 13 votos a favor, uno en contra (Estados Unidos) y una abstención (Reino Unido).
Charbonneau dijo que la actitud de Washington es incoherente porque, por un lado, pide a Israel y a los terroristas palestinos que respeten la ley humanitaria internacional y protejan a los civiles gazatíes y, por otro, impide que el Consejo de Seguridad traduzca esos llamados en textos.
Luego de hacerlo el 18 de octubre pasado, esta ees la segunda vez que Estados Unidos veta una resolución que pedía un alto el fuego inmediato en la franja de Gaza.
“Estados Unidos utilizó su veto nuevamente para impedir que el Consejo de Seguridad hiciera algunos de los llamados que los propios Estados Unidos han estado exigiendo a Israel y a los grupos armados palestinos, incluido el cumplimiento del derecho internacional humanitario, la protección de los civiles y la liberación de todos los civiles mantenidos como rehenes”, añadió el director de HRW ante la ONU.
Robert Wood, embajador adjunto de Estados Unidos, criticó al Consejo de Seguridad luego de la votación por no condenar el ataque terrorista de Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre, en el que murieron alrededor de 1,200 personas mientras que miles más resultaron heridas, y afirmó que detener la ofensiva militar permitiría que Hamás siga gobernando Gaza.
“Solo plantaría las semillas para la próxima guerra”, alertó el diplomático, quien afirmó que los milicianos palestinos no tienen ningún deseo de que haya una “paz duradera” y una resolución en el conflicto con Israel.
“Por esa razón, aunque Estados Unidos apoya firmemente una paz duradera, en la que tanto israelíes como palestinos puedan vivir en paz y seguridad, no apoyamos los llamamientos a un alto del fuego inmediato”, añadió.
Según las autoridades gazatíes, los ataques de Israel han matado a más de 17,400 personas y herido a más de 46,000.